Texto de Rincewind237 para Albarda.
Como todo lector de este blog sabrá, el día de hoy es ciertamente importante y relevante para nuestras esferas; es el día que la razón de nuestras culturas, cosmologías y lengua propia llegue. El día en el cual un par de hombres de las llanuras castellanas, montañas gallegas y asturianas, serranías andaluzas, liderados por un marino presumiblemente genovés bajo la bandera de los reinos de Castilla y Aragón, y atendiendo el contexto de la temprana monarquía hispánica victoriosa frente a los musulmanes, cambiarían al mundo.
Con pocas garantías, muchas dudas y motines, tres barcos desencadenarían un cambio global como nunca se vio. Aunque antes se supiera del Nuevo Mundo, ninguna de las expediciones, por logísticas o meros motivos de la Providencia, fueron exitosas. Los abanderados de Castilla y de lo que serían las Aspas de San Andrés lentamente se expandieron, contactando a las civilizaciones del Nuevo Mundo, avanzadas como atrasadas.
A diferencia de los procesos protestantes en la región, nuestra conquista del Nuevo Mundo fue hecha de un modo muy medieval, con caciques aceptando a las buenas o las malas al monarca católico y su fe, manteniendo sus instituciones, que eran respetadas en la medida en que no fueran totalmente contrarias a la Fe, al igual que su lengua, con la única lealtad de aceptar la Fe verdadera y el monarca católico , lo cual suponía lentamente aceptar características de su cultura y modos jerárquicos.
Al igual que los modos cuales ganaron honor los hombres que trajeron las aspas, muchos de los conquistadores eran hombres humildes que se enriquecieron con la única condición de ser vasallos de un rey, algunos siendo más cristianos que otros en sus modos, cabe decir. Y aun así, formaron civilización bajo sus pasos, una civilización jerárquica y con temor a Dios, cosa que tristemente muchos de los llamados reivindicadores del legado hispánico quieren ignorar y borrar debido a un complejo de inferioridad ante el whigismo anglo, cual destruyó las sociedades sanas de su cultura y planea hacer lo mismo contra nosotros, intentando crear un falso cuento unitario de nuestra historia o uno igualitarista sin ver los matices de lo nuestro o una satanización de un componente cultural de nuestra dualidad, cual es mas sincero que los primeros intentos.
Y muchos olvidando que cuando la tragedia tiró, y el mundo nuestro se rompió, hubo hombres valientes y gente valiente dispuesta a repararlo, a nuestro modo, fuera de iluminismos o marxismos.
Que este día de nuestra Raza, entendida en el modo de idioma y costumbres que enlazan y crean culturas, sea un día de recordar por los valores que luchamos. Que a pesar de la injerencia cultural de un imperio decadente y uno amenazante, podemos seguir confiando en nuestros lazos sin necesidad de siempre estar de acuerdo, de ser tanto de Europa como de las Américas, a como de Asia o África.
Tenemos que formar comunidad y forjar nuestra fe, hacia Dios, y a ser impasivos contra quienes quieren adulterar y destruir nuestra historia. Cierro este monólogo con una oración a Nuestra Señora del Pilar.
«Socorre a los que padecen desgracias, a los que sufren soledad, ignorancia, hambre o falta de trabajo. Fortalece a los débiles en la fe. Fomenta en los jóvenes la disponibilidad para una entrega plena a Dios. Protege a España entera y a sus pueblos, a sus hombres y mujeres. Y asiste maternalmente, oh María a cuantos te invocan como Patrona de la Hispanidad».
ALBARDA 